DOMINGO 25 EN TIEMPO ORDINARIO (Septiembre 24, 2017)

DOMINGO 25 EN TIEMPO ORDINARIO (Septiembre 24, 2017)

Énfasis Sugerido

“Busquen al Señor ahora que lo pueden encontrar, llámenlo ahora que está cerca.”

Perspectiva Salesiana

Todos buscamos al Señor en nuestras vidas, estemos conscientes de ello o no. Nosotros buscamos a Dios en nuestros hogares, en nuestros barrios, en nuestras escuelas y oficinas. Nosotros buscamos a Dios en nuestros éxitos y también en los obstáculos que se nos presentan. Nosotros buscamos a Dios en nuestras esperanzas, en nuestros miedos y en nuestros sueños. Nosotros buscamos a Dios en todas aquellas cosas que tenemos que hacer el día de hoy.

Con todo lo que tenemos que hacer, quién tiene tiempo para pasarlo en esta búsqueda? La verdad es que buscar a Dios no implica tener que hacer algo extra: buscar a Dios es simplemente abrir nuestras mentes, nuestros corazones, nuestros oídos, nuestros ojos y nuestra imaginación a Dios quien siempre está con nosotros, presente en todas esas tareas que tenemos pendientes por hacer.

San Francisco de Sales escribió: “Dios esta en todas las cosas y en todos los lugares. No hay una cosa o un lugar en donde Dios no se encuentre verdaderamente presente. Así como las aves siempre encuentran aire en donde quiera que vuelan, de la misma forma nosotros encontraremos a Dios presente a donde quiera que vayamos, o donde quiera que estemos. Todo el mundo conoce esta verdad – intelectualmente hablando- pero no todo el mundo internaliza esta verdad y la asume como propia” ( Introducción a la Vida Devota, Parte II, Capítulo 2). Dios no solo sabe en donde están ustedes, sino que “esta presente de manera particular en sus corazones y en el centro mismo de sus espíritus. El los aviva y los anima con su divina presencia, por que Dios está ahí como el corazón de su corazón y el espíritu de su espíritu". (Ibid)

Entonces, el problema no es que Dios no este presente en nuestras vidas, sino que nosotros simplemente –y trágicamente- fracasamos a la hora de reconocer la presencia de Dios. Francisco escribió: “Aún cuando la fe nos garantiza su presencia, como no podemos verlo con nuestros propios ojos muchas veces nos olvidamos de Dios y nos comportamos como si Dios estuviese lejos de nosotros. Aún cuando nuestro intelecto nos dice que Dios esta presente en todas las cosas, fracasamos a la hora de reflexionar sobre esta verdad y actuamos como si no la supiéramos.” (Ibid)

Uno de los métodos más poderosos y efectivos para buscar al Señor – para poder ver al Señor quien siempre está presente- es la oración. No importa cuan ocupados, frustrados, solitarios o jubilosos nos sintamos, no importa cuan atareados resulten nuestros días, siempre tenemos oportunidad de orar: una palabra, una frase, un pensamiento o una imagen que nos recuerde que el Dios que nos creo, quien nos redimió y quien nos inspira, es verdaderamente Emanuel, un nombre que significa Dios está con nosotros!

Porqué es tan importante todo esto? Cuando estamos conscientes de la presencia de Dios es más probable que nos tratemos los unos a los otros de forma amorosa, pacífica, preocupada, con dulzura, con verdad y con gentileza. Por el contrario, cuando no recordamos la presencia de Dios, nosotros… somos mas propensos a comportarnos de formas que van en contra de sus designios.

Busquen… vean al Señor quien siempre está presente en ustedes… en los demás… en todas las actividades de cada día. Y una vez conscientes de esta verdad, recuerden que deben pensar, sentir, soñar, trabajar y actuar de acuerdo a la misma!