TERCER DOMINGO EN TIEMPO ORDINARIO (abril 14, 2024)

TERCER DOMINGO EN TIEMPO ORDINARIO (abril 14, 2024)

Enfasis Sugerido

“La paz esté con ustedes...”

Perspectiva Salesiana

En 1954, el gran pintor francés Henri Matisse murió a la edad de 86 años. Durante los últimos años de su vida la artritis había lisiado y deformado sus manos de tal manera que le era extremadamente doloroso sostener un pincel, haciéndole por supuesto casi imposible pintar algo hermoso. Aun así continuó pintando usando un trozo de tela que colocaba entre sus dedos con la esperanza de impedir que el pincel se deslizara en su mano. Un día alguien le preguntó porqué continuaba sometiendo su cuerpo a ese sufrimiento y a esa frustración. ¿Por qué continuaba pintando si se enfrentaba a un dolor de tal magnitud? La respuesta de Matisse fue algo así: “el dolor pasa, pero la belleza permanece”.

¿Por qué pienso en esta historia hoy, tercer domingo de Pascua? Si ponemos atención al pasaje del Evangelio de Lucas, Jesús encuentra a sus discípulos en grupo por primera vez y les dice, “La paz sea con ustedes”. Este pasaje del Evangelio le sigue a historia de los dos discípulos en camino a Emaús. Al igual que cada uno de los discípulos- igual que a todos los discípulos- hay ocasiones en que nosotros dudamos del poder de Dios. Hay ocasiones en que nos cuestionamos sobre los eventos de nuestras vidas, sobre la presencia de Dios en esas vidas desordenadas, dolorosas y a veces desdichadas.

Algunos de nosotros venimos cada domingo a la iglesia y nos preguntamos si las afirmaciones hechas por la fe, las historias de sanación y las promesas de Jesús son ciertas. ¿Cómo puede darle Jesús paz a nuestras vidas cuando sentimos que nuestras vidas son todo menos apacibles? Estamos llenos de preocupaciones: por nuestro hogar, nuestro carro, nuestros hijos, nuestros trabajos, nuestras notas, nuestra familia, nuestros amigos, nuestra salud, nuestras responsabilidades, nuestras inversiones y nuestras pensiones. Incluso nuestro horario del día nos puede producir ansiedad; nos preocupa darnos cuenta que tenemos que estar en una cantidad de lugares a diferentes horas. Simplemente somos muy responsables y estamos muy ocupados para estar en paz!

¿Cómo puede Jesús prometer- y mejor aun proveer- paz?

Recuerden el ejemplo de Henri Matisse. Todas las preocupaciones, el dolor y la frustración que ustedes y yo experimentamos ultimadamente, y en su mayoría, pasarán e incluso pueden llegar a convertirnos en personas mas fuertes y hermosas para Dios y para los demás: La belleza de lo que nos habremos convertido a lo largo de ese proceso perdurará mucho después de que los problemas hayan desaparecido en el pasado.

San Francisco de Sales nos recuerda que no debemos preocuparnos por las tensiones y los problemas de nuestra vida, por que el mismo Padre amoroso que hoy nos cuida, nos cuidará también mañana. El nos protegerá del sufrimiento o nos dará una fuerza indestructible para superarlo. Estén en paz y desechen todos los pensamientos e ideas que les producen ansiedad.

La paz sea con ustedes- aun en medio de los retos que impone la vida- y manténganse enfocados en la belleza que perdura!